Barquillo de conejo y calabacín, una lúdica forma de comer conejo.

Nos divierte comer barquillos, su forma cilíndrica, el placer de desenrollarlos poco a poco, la facilidad para poder bañarlo en chocolate, mermelada... Fue un acierto inspirarse en este dulce para resolver una receta de conejo y calabacín. La pasta brick adquirió en el horno el crujir del barquillo y su forma cilíndrica resultó perfecta para bañarla en la salsa de curry.

INGREDIENTES (PARA 4 PERSONAS)

4 hojas de pasta brick

2 muslos de conejo

1 calabacín

2 cebolletas

1 zanahoria

1 cucharadita de harina de maíz (Maizena)

1 copa de vino blanco

aceite de oliva

1 cucharadita de curry

sal

Elaboración

01 Cocemos los muslos de conejo, la cebolletas y la zanahoria en la olla rápida. Cocinamos alrededor de 12 minutos a partir de que suba la válvula de seguridad (cada cual conocerá los tiempos de su olla).

02 Colamos el caldo y reservamos. Desmigamos el conejo y lo reservamos.

03 Pochamos el calabacín partido en cubitos en una sartén con aceite de oliva y una pizca de sal.

04 Añadimos el conejo y le damos unas vueltas. Lo colocamos en un plato para que se atempere.

05 Pochamos en una sartén la otra cebolleta finamente picada. Añadimos el curry y salteamos un poco. Añadimos el vino y cuando haya dado un hervor, agregamos un vaso del caldo del conejo y dejamos reducir. Ligamos con un poco de maizena diluida en agua fría. Ponemos a punto de sal y reservamos.

06 Extendemos las hojas de pasta brick y repartimos el relleno entre las 4 láminas, colocando un montoncito en cada una, enrollamos con forma de barquillo.

07 Colocamos los barquillos en una placa de horno y horneamos a 180ºC durante 5 minutos.

08 Emplatamos con la salsa.