FRIGO YEMA, CASI HELADO DE FRAMBUESA.

Puede parecer absurdo pero ¿nunca os ha parecido que vuestro helado estaba demasiado helado? A nosotras nos suele ocurrir, por lo que este postre semi helado nos ha parecido un gran acierto. Su textura espumosa helada lo convierte en un delicado bocado para refrescar el paladar sin congelarlo. Además, ésta es una receta que se puede preparar fácilmente, sin necesidad de recurrir a la heladera, con un excelente resultado. Si no queremos entretenernos, podemos preparar este semifrío en un sólo molde para luego servirlo en copa o tarrina. A nosotras nos pareció divertido utilizar moldes de silicona cúbicos para presentarlos en cucuruchos de barquillo. El jugo de frambuesas, cortesía de Pazo de Vilane, dio como resultado un color rosa que nos evocó al mítico Frigo Pie de los años 80. Os presentamos nuestra versión, la Frigo Yema, para la que hemos utilizado el cortapasta de la mascota del blog.

INGREDIENTES

150 g de jugo de frambuesa Pazo de Vilane

(o 500 g de frambuesas frescas o congeladas)

200 g de azúcar glas (si hacemos nosotros el jugo de frambuesa)

150 g de azúcar glas (si compramos el jugo de frambuesa)

4 claras de huevo

400 ml de nata líquida 35% de materia grasa

vaina de vainilla o unas gotas de extracto de vainilla

algunas frambuesas frescas (para servir)

ELABORACIÓN

01 Podemos utilizar jugo de frambuesa de los que oferta el mercado. El de Pazo de Vilane es exquisito, elaborado con un 70% de fruta entera y un 30% de fructosa para su maceración.

02 Preparamos el jugo de frambuesa si es que no utilizamos uno comprado. Si las frambuesas son congeladas, las sacamos del congelador unas horas antes. Trituramos las frambuesas con la batidora y colamos para eliminar las semillas. Reservamos el jugo obtenido.

03 Batimos a punto de nieve las claras, añadimos el azúcar poco a poco, hasta que queden bien compactas. Reservamos.

04 En otro bol montamos la nata con la ayuda de la batidora, añadimos la vainilla. Para conseguir que la nata se monte adecuadamente es imprescindible que contenga como mínimo un 35 % de materia grasa y que tanto la nata, como el bol y el accesorio de la batidora estén fríos. Un truco que utilizamos es meter la nata en el congelador media hora antes de montarla (no debe congelarse).

05 Con una lengua de silicona, incorporamos poco a poco la nata a las claras, con movimientos envolventes para que la espuma no baje demasiado. Agregamos el jugo de frambuesas y removemos levemente con el objetivo de que la mezcla quede veteada.

06 Forramos nuestros moldes con papel film, dejando que sobresalga por los bordes con el fin de desmoldarlos fácilmente.

07 Rellenamos nuestra mezcla en los moldes, intentando no dejar burbujas y metemos en el congelador durante 12 horas.

08 Os recomendamos sacarlo 10 minutos antes de servirlo.